Me encantan los scones para desayunar o con un café frio por la tarde. Esta receta rápida se puede hornear el mismo día que se hace la masa, o se puede refrigerar o congelar y hornear luego. Si no tienes bayas no dudes en añadirle pasas, trocitos de chocolate, fruta picadita o frutos secos. Si haces esta receta, ¡Cuéntame qué complemento has utilizado!
¡Te recomiendo hacer esta receta después de la cena y hornear el día justo antes del desayuno!
Ingredientes:
¾ taza de harina integral
½ taza de avena
1 cucharada de azúcar, yo usé azucar de coco
⅛ cucharadita de sal
2 cucharadas de mantequilla fría
½ taza de yogur
1 taza de frutas picadas. He utilizado albaricoques picaditos y frambuesas congeladas
Miel
Instrucciones:
Preparar una bandeja para hornear con papel para hornear
Precalentar el horno a 375
En un bowl mezclar los ingredientes secos
Con los dedos o un tenedor incorporar la mantequilla a los ingredientes secos hasta que la mezcla se desmenuce
Añadir el yogur, mezclar
Incorporar las bayas o la fruta cortada en dados a la mezcla
Trabajar la masa lo menos posible, que se desmorona un poco y tener migas alrededor de la masa son una buena señal
Colocar la masa en una superficie de trabajo enharinada
Con las manos enharinadas, forma una bola y aplastarla, formando un círculo
Espolvorea un poco de avena por encima
Cortar en 8 cuñas
Pasar a la bandeja de hornear
Hornear a 375 durante unos 20 minutos o hasta que obtenga un color dorado
Dejar enfriar antes de comer, es difícil pero necesario
Me gusta ponerle un poco de miel por encima antes de comerlo!
Tips:
Cuando estés haciendo esta receta no amases mucho, solo mezcla lo necesario. Si los vas a congelar: colócalos en una bandeja o plato en el congelador, cuando estén duritos los puedes transferir a una bolsa ziploc o el envase que gustes y de nuevo al congelador. Luego los puedes hornear congelados.
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